Solo tú y yo sabemos lo que ignora la gente
pues ambos disfrutamos el mismo desvarío
aunque los dos pensemos de forma diferente
y las aguas transiten por diferente río.
Que los días son largos y las noches son tristes
y los miedos se agarran en el mismo asidero
y cuando aterriza el alba a cambiar se resisten
viendo pasar el tiempo por distinto sendero.
Siempre así tropezando con la misma torpeza
escarbando los sueños de un posible delirio
los pasos dando en falso por la misma maleza
aunque los ojos curen con el mismo colirio.