Hay algo de dinosauria en mí
de ojo limpio y torpe pisada
de piel resistente llamada al exterminio
en el cuello alto
en los roncos gemidos
en el espasmo
algo de fósil cavernaria
de saliva inmóvil
de ternura y asco.
Don Juan trasnochado
qué luego llegaste al panteón
del arrepentimiento
qué afán de penitencia ahora
levanta el telón don tenorio
la escena anterior fue tu engaño
deja ya el ridículo
te lo exigen
estos tiempos
Inés
sobre la tumba
te lo ordena.
En el parqueo
entonces
no encontré la contraseña
y revolví
y busqué
y volví a revolver
y tiré la bolsa
y maldije
y lloré
porque algo
estaba fuera de control
abandonado en el sueño
despojado y mudo
como mi bolsa.
Independencia
Estrangulada
entre dos tiempos
ella frente a la puerta
el cordón umbilical
revirtiéndose
impredecible vínculo femenino
atando fuertemente
como nunca antes.
Informática
Cuando ya no esperé encontrar tu nombre
en la pantalla
y no me asustó el silencio
cuando ya no fuiste referencia en el tiempo
cuando la lejanía fue real
el olvido había borrado nuestros mejores archivos
éramos dos usuarios anónimos
en una intemperie infinita.
La buena de la novela
a veces
nostálgica
me formulo
las preguntas obstinadas de las novelas rosa
y digo serás tú el hombre
existe en verdad el destino
y me río ni destino ni hombre ni nada
solo la ilusión pasajera
el recuerdo lujurioso que se queda.