Hablemos con franqueza. Medias tintas solo para el amor son sucedáneos, se suben a la chepa en los amaños y engañan a los ojos con sus fintas huyendo la pasión por sucios caños.
Engáñate si quieres, tú te engañas, aquello que era tuyo ya no es, era, que fueron convirtiéndose en patrañas sacándote la sangre cual pirañas, no quieres admitir hoy tu ceguera.
No me digas que no puedes respirar, que no logras suspirar cuando te miro si a tus ojos los confundo con el mar y me incitas a temblar porque te admiro.
Otro año más que pasa y lo celebro, siempre atento observando lo que pasa, otro más, más o menos, mas, ¡qué guasa! mi cuerpo ayer de pino se ha hecho enebro.
Era linda y bella y yo la perseguí, y en sueños seguí tras ella, tras ella, cual fuera un destello, que al cielo subí, y yo allí la vi cual fuera una estrella.
Quizás llegue ese día, tal vez sea mañana en que las golondrinas desde su palomar, bajen a tu ventana, te animen a cantar aupándote al altar de la verdad freudiana.
Y un día lo impusieron, un amigo ¿mas si yo no le conozco? eso es igual, es por tu bien, verás que es muy leal, silencioso y que siempre irá contigo, compadre de fatigas más cabal.
Me dicen los que dicen saber todo, que debo comportarme diferente, que cambie mis costumbres; que la gente es igual aunque tenga o no el periodo y el pecho o no turgente.
¡Zoe, así se llamaba de nombre mi perrita! hoy ya nuestra mascota se encuentra muy viejita Feliz naciste un día para alegrar la casa jugábamos contigo, como un bebé de gasa.
Hoy he decidido, por fin, mandar a paseo a mi cerebro. Ya estoy harto de sus insinuaciones. ¡Qué agobio! ¡Siempre detrás de mi! A todas horas escuchando sus letanías y canciones,
Si tú algo has de decirme pues dímelo a la cara, mejor una vez rojo que ciento colorado, si es cierto que he pecado mejor es si se aclara y así el dolor se para por algo que ha pasado.