Yo quien soy no sé, ¿acaso tú lo sabes, ¿quién eres tú, aquí qué representas?, por qué razón viniste, no me mientas, cuánto debes de andar hasta que acabes, no digas lo presientas?
Aquello que de niño me vendieron hoy dicen ya no existe, se ignora lo mataron o murieron, y empiezo ya a dudar si me mintieron, quizás es que jugaran al despiste.
Hoy es domingo. Ya sé que no es domingo que hoy me levanto con ganas de incordiar, llevar la contraria y terco marear. A quien decida leerme, sin distingo, se expone a naufragar.
Beber, lo que es beber, nunca he bebido, sabiendo que el beber no es conveniente, beber, eso lo sabe mucha gente convierte en un borracho empedernido y acaba resbalando en la pendiente.
Pues que Dios siempre da oportunidades cuando vuelva a nacer será distinto que hoy prometo ser fiel a sus verdades. Caso omiso he de hacer a veleidades ornadas de pelaje variopinto
Tengo un monte en subconsciente de mi infancia junto a intensas sensaciones. Los gorriones, la íntima presencia erguida de los pinos, las encinas, los enebros, los caminos llenos de matorrales y de charcas.