No todos los que están en los altares pudieran demostrar que han sido santos, igual que los que están en camposantos no pueden afirmar que han sido autores.
Os lo aseguro, yo soy disciplinado, si me aconsejan, yo sigo los consejos. Cuando turbias aguas bajan, si avisado me deshago de pesares que son viejos.
Cuando la marea baja y el sol comienza a brillar raudo voy a pasear por la arena de la playa. Tranquilo ando sin parar por donde quiera que vaya, observando en mi atalaya, descubriendo el hontanar.
Una persona era que miraba al espejo y se daba asco, ¡qué sería que hasta el espejo recriminaba y se lo afea! que al verla los hombres se revuelven mirando con gran fiasco...
Resulta que allí móviles no había, parece que hace mucho, mas fue ayer, la gente se solía entretener tirando piedrecitas a la ría creando circulitos para ver que al agua poco a poco se expandía.
Hay muchos que presumen de ser buenos, su tiempo dedicando a predicar, no crean que ellos quieren engañar ni deben de dudar ni mucho menos, son buenos pues lo dicen sin parar.