¿Qué hace él allí, en el medio del camino, desnudo, incomprendido y solitario, sufriendo el sol que abrasa, sin sudario, carente del ajuar con el que vino,...
Pues la vida es un sueño dislocado, como un muerto que piensa aun está vivo, una copia que expira en un archivo, la fuente en la que el caño ya se ha ahogado.
Aquí os dejo mis versos doloridos desnudos con sus lágrimas y llantos, los sueños que al azar vagan perdidos aquellos que aun suspiran aturdidos y hasta los desencantos.
Que la vida es un cuento nadie lo duda, que los que la bendicen solo son cuentos, pa’ tapar las heridas usan ungüentos y cuando no hay repuestos piden tu ayuda..
Ayer llovió bastante, hoy ya no llueve, quizás mañana llueva o el sol saldrá, el aire hoy a las hojas no las mueve y se ignora si ha de llegar la nieve....
Que un día puso el viento una simiente y fue germinando al sol, eso hizo horas después y al día siguiente y así una y otra vez tan insistente forjando de este modo a aquel crisol.
El que escribe, Donaciano,
como el labriego en Castilla
va esparciendo la semilla
a voleo con la mano.
Lo mismo que hace el cristiano
que a Dios no ha visto y le reza
y espera de su grandeza
que llegado el mes de abril
le riegue con aguas mil
la madre naturaleza.