LA LIBERTAD SE GANA (Mi poema)
Salvador Bécquer Puig (Mi poeta sugerido)

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MI POEMA… de medio pelo
 

Virginia, amiga mía, tú, tan inteligente,
tan fiel y persistente, y tan contaminada,
no olvides que es el agua que al caño hace la fuente,
navega a su albedrío, libre  y contra corriente,
y acaba fustigando a su pie desconfiada.

No dejes que algún dueño te escoja prisionera
así diga te quiera, que no te quita el sueño.
La libertad resbala del suelo por la acera
va silbando a su antojo hasta hacerse quimera,
para arañar el alma con rabia y con empeño.

Que a veces es humilde y a ratos traicionera,
de la que nadie espera tenga un rostro risueño.
La libertad se gana, pues ella no te espera,
es codiciada y noble mas luce una alambrera
y si alguien la quisiera debe fruncir su ceño.

Que el poder no se logra por la ley de la fuerza,
mejor si es resultado del habla y la palabra,
todos tienen por lema ser ellos quien la ejerza,
para algunos no existe nadie que la retuerza
mientras para los otros la puerta esperan se abra.

Todos son similares, todos buscan lo mismo,
el mismo catecismo y subirte a sus altares
con gestos familiares no exentos de cinismo,
desde se bautizaron, son reos de egoïsmo,
dirán que hace buen tiempo así que llueva a mares.
©donaciano bueno

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«Las cadenas de la esclavitud solamente atan las manos: es la mente lo que hace al hombre libre o esclavo». (Franz Grillparzer)

No me gusta esa expresión habitual de «yo soy de tal club, yo soy de tal partido político…» Comprendo, es una forma de hablar pero ni aún así me gusta. Uno debe ser en primer lugar de uno mismo, sus reflexiones, sus ideas aunque gran parte de las veces éstas, sepamos, ya estén contaminadas por parte de quienes tienen interés en atraparnos  para sus convicciones y/o de sus pecunios.

MI POETA SUGERIDO: Salvador Bécquer Puig

Salvador Bécquer Puig

Puig

«me avisan que murió salvador puig»
anuncia austeramente víctor cunha
¿es posible?
es posible el infarto cerebral
el cáncer de pulmón
la hora final
la mejoría precaria
la mejoría
¿es posible?
el poeta enreda su error en la Internet
desesperada
¿qué decir? ¿soñar con un milagro? sueño pues
¿es posible?
es posible la inexactitud del texto
para nosotros despalabrados
como la muerte ficcionada
el error del poeta sobre el poeta
salvador
bécquer Puig
por él lloraría
lloraríamos Montevideo
una ciudad con mujeres con ojos
color tupé
con los nosotros huérfanos
cagándonos de hambre y de soledades
de desapariciones forzadas
sentenciados a muerte desde la teta
equilibristas a punto de caer
sobre el público
por él lloraría
lloraríamos minchos y outes
con sus mesas de bares
con sus perdedores
sus listos para nada
que nadie está preparado para su vez y su hora
ni siquiera para la de los otros
y menos
muchísimo menos para la del poeta
bécquer sediento
como un tropel de marineros
riéndose entre dientes de la Huraña
-flaca y torcida como una poeta troskista-
él avisa que nos dejemos de joder:
pero déjense de joder en serio
¿qué decir? ¿soñar con un milagro?
soñamos pues.
(Macunaíma).

MUERTE DRIBLEADA

(a Eduardo Darnauchans)

Toda la muerte cerca a un
niño, que le hace una finta,
se le escapa, la descoloca.
No suelta la pelota.

No me compliques la vida,
dice la muerte.
Y el niño se le ríe en la cara.

NEGOCIOS

Mi negocio es la vida.
La muerte sólo pasa la factura.
Algunos entendidos aseguran
que hay algo mís:
la herencia de la muerte.

Para mí «contradigo» el negocio
es mirar unas gaviotas, ponerle nombre
a cada una de ellas y,
como digo gaviotas,
puedo decir el aire en que planean,
cada aleteo del viento.
Es cierto que, cuando los nombres
diversos del aire pasan a ser silencio
o noche, las gaviotas se van,
son simplemente ideas,
vuelos imaginados, alas
que no se ven, negocios extraviados.

Los asesores de confianza,
expertos, sin embargo,
creen firmemente en su
particular nombre de pila,
acaso más que en Dios.
Cuando oyen ese nombre
se dan vuelta en la calle
como cualquier mortal o como
si fueran un vecino de tantos,
pero no saben bien qué diferencia hay
entre una bandada de gaviotas y el nombre
«escondido» de cada una de ellas.

Este es sólo un ejemplo de negocios.
Hay otros y muy prósperos.

La idea del negocio
es el comienzo de la vida
que tiene, entre otras cosas,
una descomunal plusvalía de risas.

TANGO INFINITO

Volverás
Hoy fue la noche quien lo dijo
Hoy la noche cayó del caballete
y la ventana entró pintando
lunas azules en mi cuarto

Volverás
Aunque
la noche mienta
Porque
la noche inventa.

Al Comandante Ernesto Che Guevara

(Salvador Puig – Anónimo)
Las palabras no entienden lo que pasa:
Las vocingleras, las oscuras, las dóciles,
las que llaman las cosas por su nombre,
las que inventan el nombre de las cosas;
las palabras que dije o me dijeron,
las que aprendí en los libros,
las que escribo,
las que pensé mirando una ventana,
las que acercándose al silencio, gritan;
las que al tocar el fuego, se desfogan,
las que truecan los trinos y los truenos,
las que sirven la mesa de mi casa,
las de la nítida caligrafía que cae por las paredes de la escuela,
las que dicen a dúo el pez y el pájaro;
las palabras que tuve o que no tuve
para llamar al mundo y que viniera,
las que tienden un hilo minucioso
que va de los balcones a las bocas,
y de las bocas a la historia, y pasan,
las que pasan la noche entre papeles,
o suben la escalera del insomne,
y se introducen en su sueño a ciegas;
las que ordenan el ruido en los rincones,
las que barren el vómito de rabia,
las que saltan del fémur a la luna,
las que cortan la sombra calcinante,
las que labran un nombre en una piedra
para mejor perpetuar el olvido,
las que bajan al árbol por el aire
y se trepan al cielo por el tronco,
las que mastican un cangrejo lento,
las que anuncian el fin de la Cuaresma,
las que le quitan sueño al asesino
y lo dejan dormir y le montan guardia,
las que no sangran, aunque se las hiera,
las que no mueren, aunque se las mate;
las que roban futuro en un embudo,
las que administran mitos y virtudes,
las que mantienen trato con el viento,
las que advierten el agua incinerada,
las que abren los labios de la tierra
buscando el astrolabio de tu grito,
las que te dicen, sin creer que oyes:
–Vuelve a pelear Ramón, aunque te mueras…
Las palabras no entienden lo que pasa.

EL AMO

El amo
percibe siempre al otro como amo.

No puede retirarle
su condición de semejante,
lo cual explica muchas efemérides
épicas, familiares o simplemente
historias inventadas
por el deseo.

Eres —dice el amo— mi sirviente,
pero no puede amortiguar el peso
poderoso del otro.

Amortiguar al amo es
una tarea imposible
como salir a cazar mariposas
con redes de pescar,
estrellas no nacidas o muertes apagadas.

DISTANCIAS

Hay que hablar a los gritos
porque el mundo está lejos.
Uno
dispone apenas de unas manos
con pequeñas falanges que
se empeñan en acercarlo.

Pero no. También hay unos ojos
que ven colores, gracias
a un gen femenino que le cayó
a un tipo como yo, viril y todo eso.

No puedo imaginarme
oyendo solamente “Ojos Negros”
o sin mirar el mundo
en la TV de colores.

También tengo una boca, madre,
de hablar bajito, como
cuando oíamos música.
No tengo más remedio que decírtelo:
el mundo
me está comiendo hasta los codos.

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