»MANUEL MACHADO
Breve Biografía de Manuel Machado Manuel Machado, hermano de Antonio, el más famoso, algunos de los títulos más conocidos de Machado son “La aparición de Alma“, “La fiesta nacional“, “El mal poema” y “Cante hondo“. Podrás leer en nuestra web poemas como “Dolientes madrigales“, “El jardín gris” y “Otoño“. Es importante señalar también que escribió varias obras junto a su hermano Antonio y que durante años fue miembro de la Real Academia Española. Yo soy como las gentes que a mi tierra vinieron Mi voluntad se ha muerto una noche de luna En mi alma, hermana de la tarde, no hay contornos… Besos, ¡pero no darlos! Gloria… ¡la que me deben! ¡Ambición!, no la tengo. ¡Amor!, no lo he sentido. De mi alta aristocracia dudar jamás se pudo. Nada os pido. Ni os amo ni os odio. Con dejarme Mi voluntad se ha muerto una noche de luna Frutales Cristales Umbría Paleta Era un suspiro lánguido y sonoro Pero su seno el mar alzó potente, Para mi pobre cuerpo dolorido, para mi amarga vida fatigada… Hasta que el pueblo las canta, Tal es la gloria, Guillén, Procura tú que tus coplas Que, al fundir el corazón Rico pan de esta carne morena, moldeada Vuestros nombres, de menta y de ilusión sabemos: Naranjos, limoneros, jardines, olivares, En este fondo, esencia de flores y cantares, Vino, sentimiento, guitarra y poesía A la sombra fresca de la vieja parra, La prima que canta y el bordón que llora… No importa la vida, que ya está perdida, Madre, pena, suerte, pena, madre, muerte, Cantares. Cantares de la patria mía, ¡Qué bonita es la princesa! El ciego sol se estrella Por una de esas raras reflexiones Estoy muy mal… Sonrío Esta es mi cara y ésta es mi alma: leed. Me acuso de no amar sino muy vagamente (SEGUIRIYAS GITANAS) Vino como vienen, Vino, y se ha quedado Como las raíces Yo no sé por dónde, Pensamiento mío, A pasar fatigas Mare de mi alma, A la vera tuya Yo voy como un ciego Ya se han acabado Desde que te fuiste, Esta cadenita, Los bienes son males, Toíta la tierra Se quebró el jarrito La prueba del frío, Yo corté una rosa El cristal se rompe Yo sentí el crujío Maresita’r Carmen, Las que se publican Rosita y mosquetas, Negra está la noche, La persona tuya En los caracoles, Horas de alegría Cuéntame tus penas, Estando contigo, La quiero, la quiero, ¡Vaya un amaguito Sin verte de día, Compañera mía, ¡Mírame, gitana, A todos nos han cantado Corazón, calla tu pena; Malagueñas, soleares Malagueñas, soleares Es el saber popular, Es el saber popular, Llorando, llorando, Conmigo no vengas… ¡Mare del Rosario, ¡Qué le voy a hacer…! Toíto se acaba: Yo no sé olvidar… Esta agüita fresca… Perdona por Dios… ¡Qué gustiyo grande Eres como el sol: No temo a la muerte, Siéntate a mi vera…, Tiene mi chiquilla Que no quieres verme… “La Lola se va a los Puertos. Sevillanas, Ni una ni uno (EL GRECO) Severa faz de palidez de lirio Aunque sólo de Dios temores sabe, en un gesto piadoso, y noble, y grave, Ven, reina de los besos, flor de la orgía, Yo no te ofrezco amores que tú no quieres; Amarnos… ¡Ya no es tiempo de que me ames! ¡Bah! Yo sé que los mismos que nos adoran, Así los dos, tú amores, yo poesía, Joven quiere en nosotros Naturaleza ¡Ah! Levanta la frente, flor siempreviva, Igual camino en suerte nos ha cabido. Crucemos nuestra calle de la amargura, Calle del Betis. Triana. La Velada de Santa Ana De envidia, al verla, una estrella, Y se apaga cuando ella La manzanilla es mi vino Es un poema divino El color que da Sanlúcar Sueña el león. Junto a las tres palmeras, Es noche. La inmensa ¿Te acuerdas?… En vano La luna aparece, A Silvio Rebello El hada pequeñita Y, juntos, de la mano Detrás va su cortejo Van los presentimientos Todo lo que hay de sueños Va, callado, cruzando Mas sólo vio, al mostrarse, Del placer que irrita, La noche sultana, Bajo el plenilunio, Son melancolía Y en el aire, húmedo Dice de ojos negros Y de desengaño. Y brota en los labios Y allá va en la noche, Del placer, que irrita, Melancolía Me siento, a veces, triste Antonio, en los acentos de Cleopatra encantado, La reina, hoja tras hoja, deshojando sus flores, Detiénese… Y Antonio ve su copa olvidada… Después, siempre a los ojos del guerrero asomada, «Hijo, para descansar, «Madre, para descansar, Siete soles forman Su cetro de oro Su rostro, que nadie Su imperio, los mundos, Y en sus ojos, cuyo I II III IV V VI VII VIII IX No tienes quien te bese No tienes quien hunda Dice tu mirada Las cosas de amores A eso de las cuatro Cuando yo me acuesto, Cádiz, salada claridad. Granada, En cualquier parte hay un espejo, Y luego, son dos vidas ¡Oh la dorada carne triunfadora ¡Oh gloria de los ojos, golosina Húmedos labios a besar mil veces… ¡Oh el delicioso seno torneado!… No se callaba la fuente, Reía, Clara, alegre, polifónica, No se callaba la fuente, Como vena Cuando la aurora volvía… Es el camino de la muerte. En la frescura de las rosas Abraza los talles esbeltos De los sabores y colores Goza de la melancolía A Francisco Villaespesa ¡Jardín sin jardinero! ¡Jardín, jardín! ¿Qué tienes? En tu boca roja y fresca Me he enamorado de ti Loco me pongo si escucho Yo quisiera ser el aire Son las líneas de tu cuerpo Siento al ceñir tu cintura Estoy enfermo de ti, Maldita sea la hora Maldita sea la sed En tu boca roja y fresca Canto de soleares, Alma son de mis cantares, Los placeres Desnudeces, No me quieras, no me esperes… Vente conmigo y haremos ¡Oh la paz, oh la paz, oh la bendita Frente al sol generoso, junto al río ¡Y un amor solo y grande, aquel primero ¡Aquel primer amor, que fue el lucero Del sol flamenco a las postreras llamas Ella escuchaba la frase violadora, Las ricas vestiduras opulentas Y en las cárdenas brasas del poniente ¡Oh, el sotto voce balbuciente, oscuro, ¡Despertarse de amor entre cantares Angel, niño, mujer…. Los sensuales ¡Y los rostros de almendra, virginales, En sueños te conocí, A Ramón del Valle Inclán Antonio, en los acentos de Cleopatra encantado, La reina, hoja tras hoja, deshojando sus flores, Detiénese… Y Antonio ve su copa olvidada… Después, siempre a los ojos del guerrero asomada, En el parque, yo solo… La hoja seca, Solo De celeste y blanco Y el viejo a lo noble, De árabe pasado En él no hay más negro Viva luz lo inunda, Lleno de poesía I ¡Oh la sabiduría en amor! ¡Si tú vieras!… Con tus ojos azules y tu pelo de oro, No pretendas vencer. Ríndete. Y que el tesoro II pasearemos la gloria -dulce paz sin victoria- El campo verde joven, bañado por la brisa, en el paisaje inmenso, en el aire fragante, A Miguel Sawa Se perdió en las vagas Se fue hasta el castillo Se fue hasta las verdes Oro y negras piedras, Siguió; entre menhires Es noche. La inmensa ¿Te acuerdas?… En vano La luna aparece, Frutales Cristales Umbría Paleta Jesús del Gran Poder, Señor, Dios mío… ¡Virgen de la Esperanza! ¡Macarena!…ADELFOS
-soy de la raza mora, vieja amiga del sol-,
que todo lo ganaron y todo lo perdieron.
Tengo el ama de nardo del árabe español.
en que era muy hermoso no pensar ni querer…
Mi ideal es tenderme, sin ilusión ninguna…
De cuando en cuando un beso y un nombre de mujer.
y la rosa simbólica de mi única pasión
es una flor que nace en tierras ignoradas
y que no tiene aroma, ni forma, ni color.
¡Que todo como un aura se venga para mí!
Que las olas me traigan y las olas me lleven
y que jamás me obliguen el camino a elegir.
No ardí nunca en un fuego de fe ni gratitud.
Un vago afán de arte tuve… Ya lo he perdido
Ni el vicio me seduce, ni adoro la virtud.
No se ganan, se heredan elegancia y blasón…
Pero el lema de casa, el mote del escudo,
es una nube vaga que eclipsa un vano sol.
lo que hago por vosotros hacer podéis por mí…
¡Que la vida se tome la pena de matarme,
ya que yo no me tomo la pena de vivir!…
en que era muy hermoso no pensar ni querer…
De cuando en cuando un beso, sin ilusión ninguna.
¡El beso generoso que no he de devolver!VERANO
cargados.
Dorados
trigales…
ahumados.
Quemados
jarales…
sequía,
solano…
completa:
verano.OCASO
la voz del mar aquella tarde… El día,
no queriendo morir, con garras de oro
de los acantilados se prendía.
y el sol, al fin, como en soberbio lecho,
hundió en las olas la dorada frente,
en una brasa cárdena deshecho.
para mi triste alma lacerada,
para mi yerto corazón herido,
¡el mar amado, el mar apetecido,
el mar, el mar, y no pensar nada…!LA COPLA
las coplas, coplas no son,
y cuando las canta el pueblo,
ya nadie sabe el autor.
de los que escriben cantares:
oír decir a la gente
que no los ha escrito nadie.
vayan al pueblo a parar,
aunque dejen de ser tuyas
para ser de los demás.
en el alma popular,
lo que se pierde de nombre
se gana de eternidad.LAS MUJERES DE ROMERO DE TORRES
en un aire caricia de suspiro y aroma…
Sirena encantadora y amante fascinada,
los cuellos enarcados, de sierpe o de paloma…
Carmen, Lola, Rosario… Evocación del goce,
Adela… Las Mujeres que todos conocemos,
que todos conocemos ¡y nadie las conoce!
lujuria de la tierra, divina y sensüal,
que vigila la augusta presencia del ciprés.
os fijó para siempre el pincel inmortal
de nuestro inenarrable Leonardo cordobés.CANTARES
hacen los cantares de la patria mía.
Cantares…
Quien dice cantares dice Andalucía.
un mozo moreno rasguea la guitarra…
Cantares…
Algo que acaricia y algo que desgarra.
Y el tiempo callado se va hora tras hora.
Cantares…
Son dejos fatales de la raza mora.
y, después de todo, ¿qué es eso, la vida?…
Cantares…
Cantando la pena, la pena se olvida.
ojos negros, negros, y negra la suerte…
Cantares…
En ellos el alma del alma se vierte.
quien dice cantares dice Andalucía.
Cantares…
No tiene más notas la guitarra mía.FIGULINAS
¡qué traviesa!
¡qué bonita
la princesa pequeñita
de los cuadros de Watteau!
Yo la miro, ¡yo la admiro,
yo la adoro!
Si suspira, yo suspiro;
si ella llora, también lloro;
si ella ríe, río yo.
Cuando alegre la contemplo,
como ahora, me sonríe,
…y otras veces su mirada
en los aires se deslíe
pensativa.
¡Si parece que está viva
la princesa de Watteau!
Al pasar la vista, hiere,
elegante,
y ha de amarla quien la viere.
…Yo adivino en su semblante
que ella goza, goza y quiere,
vive y ama, sufre y muere…
como yo.CASTILLA
en las duras aristas de las armas,
llaga de luz los petos y espaldares
y flamea en las puntas de las lanzas.
El ciego sol, la sed y la fatiga
Por la terrible estepa castellana,
al destierro, con doce de los suyos
-polvo, sudor y hierro- el Cid cabalga.
Cerrado está el mesón a piedra y lodo.
Nadie responde… Al pomo de la espada
y al cuento de las picas el postigo
va a ceder ¡Quema el sol, el aire abrasa!
A los terribles golpes
de eco ronco, una voz pura, de plata
y de cristal, responde… Hay una niña
muy débil y muy blanca
en el umbral. Es toda
ojos azules, y en los ojos. lágrimas.
Oro pálido nimba
su carita curiosa y asustada.
“Buen Cid, pasad. El rey nos dará muerte,
arruinará la casa
y sembrará de sal el pobre campo
que mi padre trabaja…
Idos. El cielo os colme de venturas…
¡En nuestro mal, oh Cid, no ganáis nada!”
Calla la niña y llora sin gemido…
Un sollozo infantil cruza la escuadra
de feroces guerreros,
y una voz inflexible grita: “¡En marcha!”
El ciego sol, la sed y la fatiga…
Por la terrible estepa castellana,
al destierro, con doce de los suyos
-polvo, sudor y hierro- el Cid cabalga.DOLIENTES MADRIGALES
de la luz, que los físicos
explicarán llenando
de fórmulas un libro…,
Mirándome las manos
-como hacen los enfermos de continuo-,
veo la faceta de un diamante, en una
faceta del diamante de mi anillo,
reflejarse tu cara, mientas piensas
que divago o medito,
o sueño… He descubierto
por azar este medio tan sencillo
de verte y ver tu corazón, que es otro
diamante puro y limpio.
Cuando me muera, déjame
en el dedo este anillo.
porque el desprecio del dolor me asiste,
porque aún miro lo bello en torno mío,
y… por lo triste que es el estar triste.
Pero ya la fontana
del sentimiento mana
tan lenta y sileciosa, que su canto,
sonoro otrora como risa, es llanto.RETRATO
Unos ojos de hastío y una boca de sed…
Lo demás, nada… Vida… Cosas… Lo que se sabe…
Calaveradas, amoríos… Nada grave,
Un poco de locura, un algo de poesía,
una gota del vino de la melancolía…
¿Vicios? Todos. Ninguno… Jugador, no lo he sido;
ni gozo lo ganado, ni siento lo perdido.
Bebo, por no negar mi tierra de Sevilla,
media docena de cañas de manzanilla.
Las mujeres… -sin ser un tenorio, ¡eso no!-,
tengo una que me quiere y otra a quien quiero yo.
una porción de cosas que encantan a la gente…
La agilidad, el tino, la gracia, la destreza,
más que la voluntad, la fuerza, la grandeza…
Mi elegancia es buscada, rebuscada. Prefiero,
a olor helénico y puro, lo “chic” y lo torero.
Un destello de sol y una risa oportuna
amo más que las languideces de la luna
Medio gitano y medio parisién -dice el vulgo-,
Con Montmartre y con la Macarena comulgo…
Y antes que un tal poeta, mi deseo primero
hubiera sido ser un buen banderillero.
Es tarde… Voy de prisa por la vida. Y mi risa
es alegre, aunque no niego que llevo prisa.LA TONÁ DE LA FRAGUA
Mi pena es mu mala,
porque es una pena que yo no quisiera
que se me quitara.
sin saber de dónde,
el agua a los mares, las flores a mayo,
los vientos al bosque.
en mi corazón,
como el amargo en la corteza verde
del verde limón.
de la enredadera,
se va alimentando la pena en mi pecho
con sangre e mis venas.
ni por dónde no,
se me ha liao esta soguita al cuerpo
sin saberlo yo.
¿adónde te vas?
No vayas a casa de quien tú solías,
que no pués entrar.
estoy ya tan hecho
que las alegrías se me vuelven penas
dentro de mi pecho.
la vía yo diera
por pasar esta noche de luna
con mi compañera.
no puedo volver…
¡Cómo por unas palabritas locas
se pierde un querer!
por esos caminos.
Siempre pensando en la penita negra
que llevo conmigo.
los tiempos alegres.
Las florecitas que hay en tu ventana
para mí no huelen.
serrana, y no vuelves,
no sé qué dolores son estos que tengo,
ni dónde me duelen.
mare, que yo llevo,
con los añitos que pasan, que pasan,
va criando hierro.
los males son bienes…
Las mis alegrías, ¡cómo se me han vuelto
fatigas de muerte!
la andaré cien veces,
y volveré a andarla pasito a pasito,
hasta que la encuentre.
pintao del querer.
¡Cómo plateros ni artistas joyeros
lo puen componer!
la prueba del fuego…
¡Cómo ha salido mi corasonsiyo
del mejor acero!
llenita de espinas…
Como las rosas espinitas tienen,
son las más bonitas.
del calor al frío,
como se ha roto de alegría y pena
mi corasonsiyo.
del cristalito fino que se rompe
del calor al frío.
guiarme los pasos,
pa que me aparte de la mala senda
que vengo pisando.
no son grandes penas.
Las que se callan y se llevan dentro
son las verdaderas.
claveles y nardos,
en sus andares la mi compañera
los va derramando.
sin luna ni estrellas…
A mí me alumbraban los ojitos garzos
de mi compañera.
es lo que yo quiero.
Tenerte en mis brazos, mirarme en tus ojos
y comerte a besos.
mare, de tu pelo,
se me ha enredado el alma, y la vida,
y el entendimiento.
son las que se van…
Que las de pena se quedan y duran
una eternidad.
te diré las mías…
Verás cómo al rato de que estemos juntos
todas se te olvidan.
que vengan fatigas…
Puñalaítas me dieran de muerte,
no las sentiría.
¿qué le voy a hacer?…
Para apartarla de mi pensamiento
no tengo poder.
tan dulce que tienen
los ojos azules que tanto me gustan…,
que tanto me ofenden!
serrana, no vivo…
Y luego, a la noche, me quitas el sueño,
o sueño contigo.
tan grande es mi pena
que el sol, cuando sale, con tanta alegría
no me la consuela.
mírame, por Dios!
Con la limosna de tus ojos negros
me alimento yo.CANTE HONDO
en una noche de juerga
coplas que nos han matado…
a todos nos han cantado
en una noche de juerga.
y seguiriyas gitanas…
Historias de mis pesares
y de tus horitas malas.
y seguiriyas gitanas…
que encierra todo el saber:
que es saber sufrir, amar,
morirse y aborrecer.
que encierra todo el saber.SOLEARIYAS
nochecita oscura, por aquel camino
la andaba buscando.
Que la suerte mía por malitos pasos,
gitana me lleva.
cómo yo guardaba el pelito suyo
en un relicario!
Yo te he querío porque te he querío
y te he olvidao porque te olvidé.
la salú, la alegría, el dinero
y la buena cara.
Yo no sé más que quererte hoy mucho
y mañana más.
¡Cómo la tengo en los propios labios
y no puó beberla!
que otra gitana se llevó las llaves
de mi corazón.
que las cositas qu tú y yo sabemos
no las sepa nadie!
cuando tú vienes se hace de día
en mi corazón.
serrana del alma, por perder la vía,
sino por perderte.
dame la mano, hermanita mía,
cuéntame tus penas.
los ojitos negros más negros y grandes
que he visto en mi vida.
De día y de noche, dormía y despierta,
me tienes presente.LA LOLA
La Isla se queda sola”.
Y esta Lola, ¿quién será,
que así se ausenta, dejando
la Isla de San Fernando
tan sola cuando se va…?
chuflas, tientos, marianas,
tarantas, tonás, livianas…
Peteneras,
soleares, soleariyas,
polos, cañas, seguiriyas,
martinetes, carceleras…
Serranas, cartageneras.
Malagueñas, granadinas.
Todo el cante de Levante,
todo el cante de las minas,
todo el cante…
que cantó tía Salvaora,
la Trini, la Coquinera,
la Pastora…,
y el Fillo, y el Lebrijano,
y Curro Pabla, su hermano,
Proita, Moya, Ramoncillo,
Tobalo -inventor del polo-,
Silverio, Chacón, Manolo
Torres, Juanelo, Maoliyo…
-cantaora o cantaor-,
llenando toda la lista,
desde Diego el Picaor
a Tomás el Papelista
(ni los vivos ni los muertos),
cantó una copla mejor
que la Lola…
Esa que se va a los Puertos
y la Isla se queda sola.EL CABALLERO DE LA MANO EN EL PECHO
Este desconocido es un cristiano
de serio porte y negra vestidura,
donde brilla no más la empuñadura,
de su admirable estoque toledano.
surge de la golilla escarolada,
por la luz interior, iluminada,
de un macilento y religioso cirio.
porque el vitando hervor no le apasione
del mundano placer perecedero,
la mano abierta sobre el pecho pone,
como una disciplina, el caballero.ANTÍFONA
amante sin amores, sonrisa loca…
Ven, que yo sé la pena de tu alegría
y el rezo de amargura que hay en tu boca.
conozco tu secreto, virgen impura;
amor es enemigo de los placeres
en que los dos ahogamos nuestra amargura.
A ti y a mí nos llevan olas sin leyes.
¡Somos a un mismo tiempo santos e infames,
somos a un mismo tiempo pobres y reyes!
en el fondo nos guardan igual desprecio.
Y justas son las voces que nos desdoran…
Lo que vendemos ambos no tiene precio.
damos por oro a un mundo que despreciamos…
¡Tú, tu cuerpo de diosa; yo, el alma mía!…
Ven y reiremos juntos mientras lloramos.
hacer, entre poemas y bacanales,
el imperial regalo de la belleza,
luz, a la oscura senda de los mortales.
que das encanto, aroma, placer, colores…
Diles con esa fresca boca lasciva…
¡que no son de este mundo nuestros amores!
Un ansia igual nos lleva, que no se agota,
hasta que se confunda en el olvido
tu hermosura podrida, mi lira rota.
levantadas las frentes, juntas las manos…
¡Ven tú conmigo, reina de la hermosura;
hetairas y poetas somos hermanos!JULIO
El corazón del estío
penetra el escalofrío
de la fuente charlatana.
llena de música el río.
Con los ojos de Rocío
se ilumina la ventana.
en las alturas sin fin,
estremecida rutila.
sale envuelta en el jardín
de su mantón de Manila.LA MANZANILLA
porque es alegre, y es buena
y porque -amable sirena-
su canto encanta el camino.
que en la sal y el sol se baña…
La médula de una caña
más rica que la de azúcar…
a la bandera de España.OASIS
Junto a las tres palmeras
se amansa el sol. Existe
el agua. Y Dios deja un momento
que los pobres camellos se arrodillen…
el árabe, tendido, al fin, sonríe
y suspira… Damasco
lejos aún le aguarda. Los confines
del horizonte brillan encendidos.
Un silencio terrible
llena el aire…En la arena
tiembla la sombra elástica de un tigre.El jardín negro
palabra es silencio…
Hay entre los árboles
un grave misterio…
El sonido duerme,
el color se ha muerto.
La fuente está loca,
y mudo está el eco.
quisimos saberlo…
¡Qué raro! ¡Qué oscuro!
¡Aún crispa mis nervios,
pasando ahora mismo
tan sólo el recuerdo,
como si rozado
me hubiera un momento
el ala peluda
de horrible murciélago!…
Ven, ¡mi amada! Inclina
tu frente en mi pecho;
cerremos los ojos;
no oigamos, callemos…
¡Como dos chiquillos
que tiemblan de miedo!
las nubes rompiendo…
La luna y la estatua
se dan un gran beso.Fantasía de Puck
de las piedras preciosas
que vive en un coral
busca al gnomo que habita
la corteza rugosa
de un antiguo nogal.
para hacer travesuras,
aquella noche van,
como hermana y hermano,
por las sendas oscuras
de la selva ideal…
de dudas y sospechas…
Y una marcha triunfal
saluda al crimen, viejo
que ruge y canta endechas
con su voz de puñal.
junto a las intenciones…
Con los recuerdos van
los malos pensamientos,
las locas tentaciones
ahogadas al brotar.
de otra vida perdido;
lo que pasó o vendrá.
Vagas curvas de ensueños:
lo que casi no ha sido…,
lo que tal vez será…
el cortejo discreto
por la selva ideal…
¡Viene el día temblando…;
va a romper el secreto
la aurora al despuntar!…
una burbuja sobre
las olas del mar…
Y una cara borrarse
en la corteza pobre
del antiguo nogal.La copla andaluza
y el amor, que ciega,
escuchad la canción, que recoge
la noche morena.
la noche andaluza,
que estremece la tierra y la carne
de aroma y lujuria.
como lagrimones,
Como goterones, sus cálidas notas
llueven los bordones.
sonora, son ayes
de las otras cuerdas heridas, punzadas,
las notas vibrantes.
de aroma y lujuria,
levanta su vuelo -paloma rafeña-
la copla andaluza.
y de rojos labios,
de venganza, de olvido, de ausencia,
de amor y de engaño…
De males y bienes,
de esperanza, de celos…, de cosas
de hombres y mujeres.
soberbia y sencilla,
como brotan el agua en la fuente,
la sangre en la herida.
paloma rafeña,
a decir la verdad a lo lejos,
triste, clara y bella.
y el amor, que ciega,
escuchad la canci6n, que recoge
la noche morena.
como una tarde del otoño viejo;
de saudades sin nombre,
de penas melancólicas tan lleno…
Mi pensamiento, entonces,
vaga junto a las tumbas de los muertos
y en torno a los cipreses y a los sauces
que, abatidos, se inclinan… Y me acuerdo
de historias tristes, sin poesía… Historias
que tienen casi blancos mis cabellos.Oriente (soneto)
la copa de oro olvida que está de néctar llena.
Y, creyente en los sueños que evoca la sirena,
toda en los ojos tiene su alma de soldado.
en la copa de Antonio las deja dulcemente…
Y prosigue su cuento de batallas y amores,
aprendido en las magas tradiciones de Oriente…
Mas pone ella la mano sobre el borde de oro,
y, sonriendo, lenta hacia sí la retira…
sella sus gruesos labios con un beso sonoro…
Y da la copa a un siervo, que la bebe y expira…Morir, dormir
es necesario dormir,
no pensar,
no sentir,
no soñar…»
morir».El príncipe
el solio del príncipe
de los siete soles.
es un haz de llamas
de mil arreboles.
miró porque ciega,
las nubes esconden.
Él todo lo puede,
todo lo conoce…
mirar mata, brillan
¡todos los dolores!Ars moriendi
Morir es… Una flor hay, en el sueño
-que, al despertar, no está ya en nuestras manos-,
de aromas y colores imposibles…
Y un día sin aurora la cortamos.
Dichoso es el que olvida
el porqué del viaje
y, en la estrella, en la flor, en el celaje,
deja su alma prendida.
Y yo había dicho: «¡Vive!»
Es decir: ama y besa,
escucha, mira, toca,
embriágate y sueña…
Y ahora suspiro: «¡Muérete!»
Es decir: calla, ciega,
abstente, para, olvida,
resígnate… y espera.
Era un agua que se secó,
un aroma que se esfumó,
una lumbre que se apagó…
Y ya es sólo la aridez,
la insipidez,
la hez…
La Vida se aparece como un sueño
en nuestra infancia… Luego despertamos
a verla, y caminamos
el encanto buscándole risueño
que primero soñamos;
… y, como no lo hallamos,
buscándolo seguimos,
hasta que para siempre nos dormimos.
¡Y Ella viene siempre! Desde que nacemos,
su paso, lejano o próximo, huella
el mismo sendero por donde corremos
hasta dar con Ella.
Lleno estoy de sospechas de verdades
que no me sirven ya para la vida,
pero que me preparan dulcemente
a bien morir…
Mi pensamiento, como un sol ardiente,
ha cegado mi espíritu y secado
mi corazón …
El cuerpo joven, pero el alma helada,
sé que voy a morir, porque no amo
ya nada.Ausencia
tus labios de grana,
Ni quien tu cintura elástica estreche,
dice tu mirada.
Las manos amantes
en tu pelo hermoso, y a tus ojos negros
no se asoma nadie.
que de noche, a solas,
suspiras y dices en la sombra tibia
las terribles cosas…
que nadie ha escuchado,
esas que se dicen los que bien se quieren
a eso de las cuatro.
de la madrugada,
cuando invade un poco de frío la alcoba
y clarea el alba.
fatigado y solo,
pensando en tus labios de grana, en tu pelo
y en tus ojos negros….Canto a Andalucía
agua oculta que llora.
Romana y mora, Córdoba callada.
Málaga cantaora.
Almería, dorada.
Plateado, Jaén. Huelva, la orilla
de las tres carabelas.
Y Sevilla.Chouette
un poco de agua clara y un peine. Y si la nena
es bonita, ¡ya esta! La noche pasa,
y el nuevo día llega.
Y no se te conoce
la batalla de amor ni a ti ni a ella.
separadas, ajenas,
dos mundos. Tú, al trabajo
cotidiano, a la eterna
lucha, pequeña o grande, cosas de hombre
archisabidas… Ella,
a dormir ya esperar la noche. Y viene
la noche, y la despierta.Desnudos de mujer
de esta gentil madona veneciana,
que ha sido Venus, Dánae, Diana,
Eva, Polymnia, Cipris y Pandora!…
eterna del mirar, dulce y fecunda
carne de la mujer, suave y jocunda,
madre del Arte y del vivir divina!
Líneas de lujuriantes morbideces
que el veneciano sol dora y estuca…
¡Oh el cabello de oro ensortijado
en el divino arranque de la nuca!Dice la fuente…
no se callaba…
saltaba,
charlaba… Y nadie sabía
lo que decía,
columnilla salomónica
perforaba
el silencio del Poniente
y, gárrula, se empinaba
para ver el sol muriente.
no se callaba…
de la noche, su barrena,
plata fría,
encogía
y estiraba…
Subía,
bajaba,
charlaba… Y nadie sabía
lo que decía.El camino de la muerte…
Es el camino de la vida…
ve reparando. Y en las lindas
adolescentes. Y en los suaves
aromas de las tardes tibias.
y besa las caras bonitas.
gusta. Y de la embriaguez divina.
Escucha las músicas dulces.
de no saber, de no creer, de
soñar un poco. Ama y olvida,
y atrás no mires. Y no creas
que tiene raíces la dicha.
No habrás llegado hasta que todo
lo hayas perdido. Ve, camina…
Es el camino de la muerte.
Es el camino de la vida.El jardín gris
¡Viejo jardín,
viejo jardín sin alma,
jardín muerto! Tus árboles
no agita el viento. En el estanque, el agua
yace podrida. ¡Ni una onda! El pájaro
no se posa en tus ramas.
La verdinegra sombra
de tus hiedras contrasta
con la triste blancura
de tus veredas áridas…
¡Tu soledad es tanta,
que no deja poesía a tu tristeza!
¡Llegando a ti, se muere la mirada!
Cementerio sin tumbas…
Ni una voz, ni recuerdos, ni esperanza.
¡Jardín sin jardinero!
¡Viejo jardín,
viejo jardín sin alma!El querer
beso, y mi sed no se apaga,
que en cada beso quisiera
beber entera tu alma.
y es enfermedad tan mala,
que ni la muerte la cura,
¡bien lo saben los que aman!
el ruido de tu charla,
y el contacto de tu mano
me da la vida y me mata.
que toda entera te abraza,
yo quisiera ser la sangre
que corre por tus entrañas.
el modelo de mis ansias,
el camino de mis besos
y el imán de mis miradas.
una duda que me mata
que quisiera en un abrazo
todo tu cuerpo y tu alma.
de curar no hay esperanza,
que en la sed de este amor loco
tu eres mi sed y mi agua.
en que contemplé tu cara,
en que vi tus ojos negros
y besé tus labios grana.
y maldita sea el agua,
maldito sea el veneno
que envenena y que no mata.
beso, y mi sed no se apaga,
que en cada beso quisiera
beber entera tu alma.Elogio de la soleá
hondo cantar del corazón,
hondo cantar.
Reina de los cantares.
Madre del canto popular.
Llora tu son,
copla sin par.
Y en mi vacío corazón
se oye sonar
el De profundis del bordón…
Llora, cantar.Encajes
tus hechizos…
Besos, besos
a millares. Y en tus rizos,
besos, besos a millares.
¡Siempre amores! ¡Nunca amor!
van de prisa:
una risa
y otra risa,
y mil nombres de mujeres,
y mil hojas de jazmín
desgranadas
y ligeras…
Y son copas no apuradas,
y miradas
pasajeras,
que desfloran nada más.
hermosuras,
carne tibia y morbideces,
elegancias y locuras…
¡No hay amor en los placeres!
¡No hay placer en el amor!La buena canción
una chocita en el campo
y en ella nos meteremos.
paz de un paisaje matinal!… ¡Cristales
de mi ventana al campo!… ¡Oh la chocita
de la copla entre los cañaverales!
sonoro, en plena gloria de la vega
andaluza -gitana que se entrega-,
bajo el azul turquí del cielo mío.
que floreció en la senda, tan seguro
que aguarda siempre y sin quemarnos arde!…
de la mañana y brilla ahora tan puro
en la senda tranquila de la tarde!La karmesse
entre escarlatas, oro y brocado;
-carmín y nácar- por el bello prado,
ricos galanes y esplendentes damas.
jugoso el labio, jadeante el pecho,
los ojos anegados… El implora,
el blando césped convertido en lecho.
desordena la torpe mano ardiente,
en ansia de las formas suculentas.
sus flechas, surge, a disparar sangrientas
un cupido rechoncho y sonriente.La primavera
de la primer lujuria!… ¡Oh, la delicia
del beso adolescente, casi puro!…
¡Oh, el no saber de la primer caricia!…
y humedad del jardín, llanto sin pena,
divina enfermedad que el alma llena,
primera mancha de los azahares!…
ojos adormilados y anegados
en inauditas savias incipientes…
como flores al sol aurirrosados,
en los campos de mayo sonrientes!Misterio
y, del amor peregrino,
he adivinado el camino
para llegar hasta ti.
Tras de aquel sueño corrí
con el dulce y loco empeño
de ser tu esclavo y tu dueño…
Pero aún tú no me contaste
por qué camino llegaste
a penetrar en mi sueño.Oriente flores
la copa de oro olvida que está de néctar llena.
Y, creyente en los sueños que evoca la sirena,
toda en los ojos tiene su alma de soldado.
en la copa de Antonio las deja dulcemente…
Y prosigue su cuento de batallas y amores,
aprendido en las magas tradiciones de Oriente…
Mas pone ella la mano sobre el borde de oro,
y, sonriendo, lenta hacia sí la retira…
sella sus gruesos labios con un beso sonoro…
Y da la copa a un siervo, que la bebe y expira…Otoño
Han cerrado
y, olvidado
en el parque viejo, solo
me han dejado.
vagamente,
indolente,
roza el suelo…
Nada sé,
nada quiero,
nada espero.
Nada…
en el parque me han dejado
olvidado,
y han cerrado.Puente genil
viste el pueblecillo…,
de blanco y celeste.
joven a lo alegre,
con sus dos colores
de blanco y celeste.
su sabor no pierde,
pero es hace siglos
cristiano ferviente…
Ora, ríe, canta,
de blanco y celeste.
que ojos de mujeres
y rizos de ébano
sobré blancas sienes.
Lo demás, hermanos,
es blanco y celeste.
y, cuando al Poniente
llega el sol, perfuma
el aire… Y parece
como que un cariño
flota en el ambiente.
y de pena alegre,
dejad me que llore,
que cante y que rece…,
porque aquí las horas
no sé lo que tienen,
que invaden el alma
de blanco y celeste.Sé buena. Es el secreto. Llora, o ríe de veras…
Sé buena. Es el secreto. Llora, o ríe de veras.
Que se asome a tus ojos y a tus labios de grana
la ternura de tu corazón, sin las hueras
flores de trapo de la retórica vana.
Es tan corta, que linda con la tortura insana
de una pasión conceptuosa y sus maneras…
Sé buena. Es el secreto. Sé mi amante y mi hermana.
sé consecuente. El Ars Amandi da al olvido.
Quema tu alma en el ara del amor soberano.
de tu hermosura sea dulcemente ofrecido,
como al sediento un sorbo de agua pura en la mano.
Y en una dulce convalecencia, una mañana
limpia y azul como tus ojos, una
de esas mañanas de cristal y grana
que aun dejan ver el pulido semblante de la luna,
de nuestro amor tranquilo, bajo del claro cielo…
Y dirá el agua pura nuestra sencilla historia.
Y nuestras sombras débiles, juntas llevará el suelo.
movido así tan tenue por tu alocada risa
feliz, recorreremos. Y tú conmigo, sola,
divinamente mudo, me tenderás, amante,
tus rojos labios como una roja amapola.Se perdió en las vagas selvas de un ensueño…
selvas de un ensueño,
y sólo de espaldas
la vi desde lejos…
Como una caricia
dorada, el cabello,
tendido, sus hombros
cubría. Y, al verlo,
siguióla mi alma
y fuese muy lejos,
dejándome solo,
no sé si dormido o despierto.
del burgrave fiero,
que está en la alta roca:
los puentes cayeron
y se despertaron
los sones del hierro.
Pasamos… Mi alma,
tras ella corriendo,
dejándome solo,
no sé si dormido o despierto.
llanuras de Jonia; y el templo
cruzó de Partenes.
Del mármol eterno
dejó las regiones…
Y se fue más lejos
con mi alma, dejándome solo,
no sé si dormido o despierto.
y muros inmensos,
y tumbas enormes
-sepulcro de un pueblo
que mira hacia Oriente
con sus ojos muertos-.
Siguió… Y arrastraba
mi alma más lejos,
dejándome solo,
no sé si dormido o despierto.
pasamos y horrendos
despojos de fieras…
Siguió; y a lo lejos,
perdióse en las selvas
oscuras del sueño
dejándome solo,
no sé si dormido o despierto.¿Te acuerdas?
palabra es silencio…
Hay entre los árboles
un grave misterio…
El sonido duerme,
el color se ha muerto.
La fuente está loca,
y mudo está el eco.
quisimos saberlo…
¡Qué raro! ¡Qué oscuro!
¡Aún crispa mis nervios,
pasando ahora mismo
tan sólo el recuerdo,
como si rozado
me hubiera un momento
el ala peluda
de horrible murciélago!…
Ven, ¡mi amada! Inclina
tu frente en mi pecho;
cerremos los ojos;
no oigamos, callemos…
¡Como dos chiquillos
que tiemblan de miedo!
las nubes rompiendo…
La luna y la estatua
se dan un gran beso…Verano
cargados.
Dorados
trigales…
ahumados.
Quemados
jarales…
sequía,
solano…
completa:
verano.Jesús del Gran Poder
Si en medio de la noche sevillana
aparece tu efigie soberana
entre gotas de llanto y de rocío…
Si de tu santa faz el sol sombrío
antes que el astro enciende la mañana
y de su sangre la Divina grana
eterna corre como fluye el río…
Y vuelven a bajar las golondrinas
a quitar de tu frente las espinas
al mandato de Amor, eterno y fuerte.
Ríndese el mal y el odio. Y tu «carrera»
al hombre enseña, al fin, de qué manera
puede ser Dios un condenado a muerte.A Nuestra Señora de la Esperanza
Y una explosión de sal y de armonía,
y un fluir generoso de alegría…
¡Y un sentir que está el alma toda llena!
¡Virgen de la Esperanza! En tu morena
cara divina, el sevillano día
toma toda la luz de su poesía…
Mañana de cristal, tarde serena.
¡Ay, de no amar, de no creer, no hay modo
cuando tu imagen célica aparece
mecida entre el incienso, en lontananza…!
¡Ay mi Sevilla, que lo tiene todo,
cuando el Señor del Gran Poder le ofrece
la Fe y la Caridad… ¡Tú la Esperanza!
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