Fernando Quiñones Chozas nació en Chiclana de la Frontera, el 2 de marzo de 1930. Pasó su infancia en Cádiz con su abuela y a empezó a trabajar a los quince años. E 1948 fundó la revista El Parnaso, y en 1950 Platero, que se publicó hasta 1954.

Se trasladó a Madrid y trabajó como periodista en el Reader's Digest. En 1957 publicó su primer libro de poesía, Ascanio o Libro de las flores, y le siguió Cercanía de la gracia con el que obtuvo el accésit del Premio Adonais de poesía en 1956.
En 1960 ganó el Premio Literario del diario La Nación de Buenos Aires con Siete historias de toros y de hombres, en el jurado estaba Jorge Luis Borges que elogió su obra, y ese mismo año también ganó el Premio de prosa de las XII Fiestas de la Vendimia de Jerez con Cinco historias del vino. En 1968 creó en Cádiz el festival Alcances e impulsó la fundación de la Peña Flamenca Enrique el Mellizo.
En 1973 realizó un viaje, con su amigo Félix Grande, como embajador del flamenco que lo llevó a conocer Puerto Rico, Perú, Argentina, Nicaragua y Chile. En 1987 viajó con José Agustín Goytisolo a Marruecos; con Antonio Hernández en el Yemen. En Cuba le otorgaron el Premio Casa de las Américas.
Su poemario En vida le valió el Premio Leopoldo Panero de poesía en 1963. Posteriormente publicó los libros de relatos: La guerra, el mar y otros excesos, Historias de la Argentina, Sexteto de amor ibérico; Crónicas de mar y tierra (1968), Crónicas de Al-Andalus (1970), Crónicas americanas (1973), Crónicas del cuarenta (1976). Con Las crónicas de Hispania ganó el premio Internacional de Poesía Ciudad de Melilla de 1985 y el Tiflos, en 1988, con Las crónicas de Castilla. En 1990 recibió el Premio de novela Café Gijón por Encierro y fuga de San Juan de Aquitania; Vueltas sin fecha le valió el Premio de Novela Breve Juan March en 1994; y Casa puesta en placeres el Esteban Manuel de Villegas. En 1998 obtuvo el Premio Jaime Gil de Biedma por Las crónicas de Rosemont.
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