A diferencia de otras ofertas educativas, Hotel Kafka invita a participar a todos con sus propuestas, sea cual sea su orientación artística, con sus fotografías, con sus escritos, con cómics o con cualquier otro medio que sirva de vehículo al laberinto de la creación, sean admiradores de las novelas galdosianas o de Bukowski, de Milo Manara o de Philip K. Dick, de García Márquez o de Paul Auster, del cine gore o del cuento fantástico.

Hotel es el refugio, es el lugar que acoge y cobija, pero en el que, al mismo tiempo, sabes que no podrás quedarte. El sitio que nunca es igual, donde tus cosas cambian de sitio cada día, donde se borran tus huellas cada mañana. Y Kafka es símbolo de las mutaciones, de eternidades efímeras, es la puerta hacia el umbral del futuro, una puerta que cruzarás porque lo de fuera ya lo has visto.