LLORAR NO SIRVE DE NÁ [Mi poema] Félix Anesio [Mi poeta sugerido]
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MI POEMA …de medio pelo |
Si debo de llorar pido clemencia Que no quise llorar. Fue mi destino. Por más que sea el mar donde confluyen No puedo más, llorar, gemir no puedo, |
MI POETA SUGERIDO: Félix Anesio
Una muestra de sus poemas
Linaje
Celebro haberte conocido.
Y he sido feliz al tropezarme
con piedras como vos
en este río discursivo que es la vida.
Antes ya vi algunas, no tantas, lo confieso.
Más hoy te veo a ti, y si mañana parto
se ha de repetir la magia de estos raros encuentros
de la estirpe de piedra viva, a la cual pertenecemos
inexplicablemente.
MALABARES
Camino al filo de la sombra
haciendo malabares
para beber el agua de la noche.
Saciada mi sed
cargado de palabras
regreso en la mañana luminosa.
SUCESIÓN Y LÍMITE
Para Alejandro Fonseca
In memoriam
Las flores de la primavera
visten las nieves del último invierno.
La fiel convergencia del día hacia el ocaso
y todas las fases de la encantada luna
anuncian la epifanía del próximo sol.
Una mujer gime su dolor.
El regocijo de la vendimia y el vino de la celebración.
Una nueva arruga que se asoma al espejo de tu rostro.
Las fotos que cuentan, otra vez, una historia de ancestros.
La extraña felicidad de un poeta que yace en una cama de hospital,
rodeado de amigos, ante el umbral de una muerte insospechada.
Un libro que se cierra como un golpe en la sombra
otro que se abre
y esta finita sucesión de versos.
Todo acontece en la esfera de un reloj sin números.
BAJO UN SOL DE OTOÑO
No ha de perderse en mí
todo el sabor del vino.
No ha de perderse en mí
todo el aroma del sexo,
ni el color de las flores,
ni la gracia del canto.
Yacen, aún latentes,
bajo la hojarasca,
como las setas de otoño.
CANTO PROFANO
Mateo 1, 23-25
La húmeda fragancia
de la vulva,
en sazón de recibir
el hálito divino
o la humana simiente,
preconiza la esperanza gozosa
de la epifanía del Verbo.
LOS CUERVOS DE LA INFAMIA
¿En qué esquina el niño pálido y rubio,
está llorando?
M. Alabau
Nueve lunas de su tiempo expiran
y la criatura debe renunciar ahora
a la húmeda calidez
de la penumbra
de su cofre de cinabrio y terciopelo.
Desterrada del paraíso por la fuerza,
vulnerada su inocencia,
ha de cruzar errante
el vasto desierto
donde hiere la luz
entre los cuervos de la infamia.
¡Oh, tábula rasa, que has de consumirte
como un cirio en el altar de nadie!
EN LAS ALTAS HORAS
El refugio de la noche es pródigo en sucesos.
Bajo la luz de una lámpara se agrupan
los medicamentos y numerosas cuentas.
Una cortina roja, unos libros y un reloj
como salidos de una película de Bergman
son la escenografía de un viaje,
de un laberinto sin regreso.
En las altas horas de la noche se escribe el verso.
DESPEDIDA DEL POETA MALDITO
Toda luna es atroz y todo sol amargo.
A Rimbaud
He visitado catedrales imponentes
donde la luz traspasa al sesgo los vitrales
y me he visto envuelto en esa magia
como ángel o demonio.
He visto el mar y conozco sus misterios.
he conocido espléndidas criaturas
que exploraron mi piel hasta el espanto
y me dieron amor; no les di nada.
He sentido el sudor en mis zapatos
viajeros y el gentil aroma de un jazmín;
el sabor del café en la madrugada
mientras el gallo canta siete veces.
El rumor ancestral de la muerte me corteja:
de ahora en lo adelante vagaré azaroso
sin brújula, ni mapa, ni destino propio;
los vientos seguiré, leve como una nube.
¡Vengase cuando quiera la parca!